HOMENAJE. No tengo fotos recientes de él; si tengo grabados a fuego sus “hola Jorge (Ho)racio”. Como escribir algo que describa en su real dimensión lo que significó Heriberto Potolo Sánchez para SB. No se puede: Yo no puedo. Quizás, decir que se acercó mucho al ideal de deportista cabal que uno concibió a lo largo de toda una vida en el deporte, se acerque un poco a ello. Mientras las lagrimas dificultan incluso ver lo que se escribe, no dejan de aparecer como flashes sus apariciones “de la nada” para acompañar a SB. Como aquélla vez en Eldorado -donde Villa, su amado Villa, perdía una posibilidad mas de ascenso-; o Tucumán, donde Chaco alcanzaba la final y mientras él se constituía en acompañante indispensable de cenas en el post partido en aquéllas gélidas noches. Siempre no dejando que los demás pagasen, haciéndose cargo de las pizzas o lo que sea porque así era el: GENEROSO. En todo y con todos. Tanto, que nos permitió acceder a ser parte de sus amigos más allá que siempre estuviera probándonos (“Entre un defensor y un atacante, ¿quien lleva las de ganar?” era una de sus preguntas-trampa preferidas). Se fue Pótolo, y con él gran parte de la historia rica del basquet del Chaco; por lo que hizo dentro y fuera de la cancha. Adiós, Jorge (Ho)racio los que te conocimos de verdad sabemos que desde hoy el basquet es un poco/mucho más triste.YA se te extraña un montón. Abrazo al cielo, querido amigo.