Un buen momento para el sinceramiento

BALANCE 2010. A la hora del balance ¿por donde empezar? ¿Por la aventura mal llevada de Aerochaco Boca Juniors dejada en manos de gente que nada sabían de basquet a tal punto de que en los avisos salía Juan Espil como jugador “xeneize” cuando ya estaba en Obras (precisamente uno de los rivales a los que enfrento en Sarmiento?

¿O por la activa participación de Chaco en el TNA -con fuerte respaldo gubernamental-donde la provincia es la que más equipos provee a la segunda categoría del basquetbol medallista olímpico?

¿O por la siempre presente apatía del mundo comercial resistenciano hacia el basquet (y a cualquier otro deporte, vale decirlo, pero aquí hablamos de basquet)?

También se puede hablar de otro año GRIS -por los blancos y negros, en lo deportivo- en lo Federativo, donde solo los U 17 lograron ganar el Regional y así acceder al Argentino de la categoría más allá de que Chaco también jugó el de U 19 -porque lo organizó- y el de mayores, donde un equipo “B-C” (habida cuenta las deserciones por diferentes motivos) al menos pudo mantener la categoría.

Quizás, lo más sobresaliente, tal y como lo viene sosteniendo SUPER BASQUET desde hace ya varias temporadas -pese al que le pese- haya sido (lo fue) lo realizado en el Sudoeste Chaqueño. Tanto por el trabajo “a destajo” de la Asociación de Basquetbol del Sudoeste Chaqueño como por lo logrado por Alvear -ascenso DEPORTIVO al TNA- y la permanencia -con seriedad- de Italiana en la misma categoría.

Y si de “mundo Liga” se habla, entonces hay que citar ineludiblemente el tremendo campeonato de la ex “C” logrado por un muy fuerte (de la cabeza) Regatas Resistencia que, con un plantel diezmado, logró incluso revertir una serie que había comenzado adversa ante un súper campeón como Hindú Club.

Y ya que hablamos de la ex “C”, habrá que decir que, al igual que el anterior Provincial y el posterior Oficial de Resistencia, fueron torneos “de veteranos” con planteles con nombres con trayectorias pero donde hay que buscar “con lupa” nuevos valores.

Hay un vacío en ése sentido y seguramente mucho tiene que ver que hay “toda una generación” -más allá de que se mezclen ya dos o tres- de jugadores de jerarquía que emigraron muy jóvenes y hoy son partícipes de la Liga en cualquiera de sus tres escalones: la “A”, el TNA o la Liga “B”.

A pesar de ello, de la ausencia de nuevos valores, tanto la final de la ex “C” como la del resucitado Oficial capitalino -No por obra de la pésima organización sino por la conjunción de buenos espectáculos y avidez del publico capitalino por verlos- mostraron que el basquet SI importa. SI gusta, más allá de que algún desprevenido pueda decir lo contrario. PARA SER MAS CLARO: HASTA QUE FOR EVER TOMO PROTAGONISMO A NIVEL NACIONAL, EL BASQUET ERA “EL” DEPORTE del Chaco.

Y hoy lo vuelve a ser. Por cantidad de jugadores, por expectativa del publico, por “embajadores” en todos los niveles -hasta dirigenciales, pasando incluso por el arbitraje-, Chaco es palabra con peso en el contexto del basquet nacional.

Y más allá del tratamiento peyorativo que se le sigue dando a la provincia en éste y todos los aspectos, Chaco -se reitera- “tiene peso” a nivel nacional.

¿Ejemplos? Los ya citados más los nombres propios de Luis “Junior” Cequeira, base de la selección argentina quinta en el mundo; Pablo Espinoza, ya mirado como posible parte del recambio de la Generación dorada; el aun vigente Rubén Wolkowyski; el juez nacional Jorge Gustavo Chávez y hasta el presidente de la Federación -Ricardo Siri- que a partir de ése lugar, supo ascender hasta la vicepresidencia de la Confederación Argentina de Basquetbol.

Así las cosas, el año vuelve a cerrarse con un sabor agridulce, porque “Chaco ES” y “Chaco puede” (perdón si a alguien esta ultima afirmación le trae malos recuerdos pero es necesaria su utilización en éste contexto), pero el único lugar donde se cristalizan los sueños es en el Sudoeste mientras Resistencia sigue mostrando falencias como el clasificar para una Liga “B” y luego no jugarla (más allá de que ésa decisión la tomara alguien -el presidente de Regatas Resistencia- totalmente ajeno al basquet).Es más, hay una realidad innegable: y es que de todos los estadios de la capital, el único que hoy podría recibir una competencia superior sería el de Sarmiento, para lo cual deberá refaccionar por “enésima” vez su parqué.

Eso en cuanto a infraestructura. Y en cuanto al material humano, este mostró -si se puede tomar como parámetro los Regionales de las diferentes categorias- que nuestra provincia está “lejos” del liderazgo que supo tener en el NEA. Así que allí está uno de los puntos “agrios” del año que se cierra.

Y siendo éste, el de la “cantera” la base de todo lo demás, hay que comenzar “ayer” a trabajar en ése aspecto. Y la que debe bajar linea, tanto con ideas como con estructura y ejemplos, es la Federación, el máximo ente de nuestro deporte. ¿Quien sino?

Porque a no engañarse. Si se quiere de verdad el crecimiento del basquet del Chaco, se debe trazar un plan a largo plazo.

Con programas que trasciendan lo meramente coyuntural -”armar equipos” para cada cita Regional o nacional- y que tiendan a “formar jugadores”. Con la idiosincracia del chaqueño y con el biotipo predominante del chaqueño. ¿No hay lungos? Creemos perimetrales. Pero creémoslos! Con un trabajo que exceda lo de los clubes- donde apenas se puede pedir que contengan a los pibes/jóvenes-, y que apunte a trabajar -por ejemplo- con grupos de 30/40 jugadores de cada categoría todo el año para que de allí salgan los potenciales no solo representantes genuinos para los seleccionados sino los también potenciales “embajadores” de la provincia. Para eso hace falta no solo una idea-guía sino también una estructura -comenzando por un cuerpo estable de entrenadores- que la Federación está en condiciones de solicitar sea subsidiada por el Estado.

Both comments and pings are currently closed.

Comments are closed.

Facebook

Get the Facebook Likebox Slider Pro for WordPress